Túmbese en una amplia tumbona y evádase  entre las coloridas piedras de sal del Himalaya y déjese mimar por los efectos beneficiosos que proporciona a su cuerpo. Los aerosoles de sal son beneficiosos para las vías respiratorias ya que las descongestionan, además  de estimular la circulación. La temperatura ronda los 60 °C, lo que permite permanecer en la sauna de piedras de sal un poco más de tiempo que en una sauna finlandesa. Después, puede ducharse con agua fría, o si lo prefiere con agua templada.

La temperatura del techo puede superar los 80 °C en esta sauna, por lo que se suda bastante. El sudor se evapora muy fácilmente en el aire caliente y muy seco de la sauna. Este proceso de evaporación enfría el cuerpo, por lo que los adultos pueden pasar fácilmente de 8 a 15 minutos a esta temperatura elevada y resultarle muy placentero. Una sauna especial y muy eficaz. Estimula la circulación y relaja los músculos y, en combinación con las duchas frías hace que aumenten sus defensas.

Relaje su cuerpo y revitalice su mente. El vapor es la receta ideal para una limpieza corporal total. Al contrario de la sauna, el baño de vapor es muy húmedo. El vapor se difunde y se condensa en el aire, creando una niebla densa y cálida. Este vapor caliente y beneficioso, junto con la condensación del vapor de agua en la piel, aumenta lentamente la temperatura corporal, haciéndole sudar. Y ésa es precisamente la intención. Ahí radica el efecto beneficioso de un baño de vapor.

Burbujas al aire libre. Quizá lo más placentero de todo. Mucha gente subestima el calentamiento del cuerpo al permanecer en agua entre templada y caliente. Incluso después del jacuzzi, el cuerpo necesita volver a enfriarse durante un rato. No tiene por que ser agua helada pero una ducha entre templada y fría es recomendable. Si combina el jacuzzi con el uso de la sauna, no permanezca en el jacuzzi más de 10 minutos.

Nuestro Hamam es una sala para masajes con jabónes y exfoliantes sobre una mesa de piedra caliente. Para obtener mejores resultados, siéntese previamente en la sala de vapor durante 5-10 minutos . Su masajista le recogerá allí.

Tras la exfoliación, le aplicarán un jabón o loción especial que acondicionará aún más su piel. A continuación, recibirá un masaje corporal completo, tras el cual su cuerpo será enjuagado y limpiado. El vapor del hammam no sólo le relajará por completo, sino que también tiene efectos beneficiosos sobre la piel. Los poros se abrirán por completo y se limpiarán. El vapor se mezcla con aceites esenciales, despejando las vías respiratorias. Después de una visita al hammam, la piel estará radiante y fresca.

Dúchese con agua caliente antes de iniciar sus actividades de bienestar, con agua tibia o fría después de utilizar la sauna, el baño de vapor o el jacuzzi. Es importante enfriar el cuerpo, incluida la cabeza, después del calentamiento. Un enjuague con agua fría le aportará un chute de energía y una perdurable sensación de renovación. Si no le agradan las  duchas frías, le gustará saber que una ducha tibia algo más larga también funciona. Sin embargo, el efecto sobre su cuerpo será algo menor.